No hay Instituto por el que haya pasado que no tuviese alguna cerradura de mal estado, de los muchos de los armarios, cajones o paneles de herramientas.
Este no es una excepción. En este caso el trabajo ha estado a cargo de Tomás. Y ha quedado muy bien.
Enhorabuena, ya queda menos.
Curso nuevo.
Instituto nuevo.
Compañeros y alumnos nuevos.
Llevamos tres semanas y me sorprende la energía de estos chavales.
Vistas las necesidades del centro, les he ofrecido hacer trabajos de lo más variados, y se han ofrecido voluntarios para cada uno de ellos.
Tienen ganas de trabajar, tantas, que considero un problema no tener trabajos para ellos.
Quiero agradecer a mis nuevos compañeros, Pascual, Pedro, Pepe y Salvadora, el trato tan cercano que me han dado desde el primer día, y las facilidades para llevar a cabo las propuestas que hago.
Por el momento hemos comenzado "haciéndonos un hueco" en el taller, moviendo cosas de un lado a otro, y de abajo hacia arriba para ganar unos metros cuadrados a la zona de trabajo, para que no nos falte eso, el trabajo.
